Todo lo realizado lo desarrollamos en base a la experiencia y al sinnúmero de tropiezos que nos va dando conocimiento o sabiduría suficiente para mejorar cada día. Además no creo que el verdadero artista es aquel que trabaja con fanatismo todo el día; el cuerpo necesita nutrirse de otras energías importantes, el Verde,
el Instinto, los Hijos, la Esposa, el descanso, el juego, los Amigos, el Arte, la Ideología, la Paciencia, la Ansiedad el Frío, el Calor, la Alegría, el Dolor y detalles
con ocho patas a veces insignificantes... que nos dan mayor riqueza y fuerza espiritual y moral para trabajar y sostenernos en este difícil mundo globalizado lleno de moda y antivalores.